Foto: Alexandra Feo
Escrito:Victoria Pinto (después de un tiempo alejada, tratando de volver)
...Y hace frio, como siempre en mi cabeza, todo empieza con un día frio, tanto que ya siento que los atraigo, y a donde voy siempre, todo se congela bajo los rayos tímidos de sol. Ya estaba cansada, habían sido días duros. Que difícil, que condenadamente difícil es cambiar de vida y quedarse tranquila, sabiendo que nada volverá a ser igual. Pero siempre encuentro un pedacito de lugar donde descansar, un pedacito de costumbre donde sentirme segura, así la vida sigue.
... Desde que te enterramos Frank, me pasaba los días sentada aquí, en la penumbra, era lo único que me animaba. Solo quería concentrarme en la vida de otra persona. Y no es sino que lo dijera para que apareciera, hacia el fondo del cementerio un hombre pequeño y encorvado moviendo nerviosamente las manos, frotándolas entre sí. Cuando notó mi presencia se puso aun más nervioso, se detuvo frente a una de las tumbas y dudoso imploraba con los ojos cerrados:
- perdoname, ...siento que si no me perdonas, mi vida no va a terminar bien, nada ira por el rumbo correcto, y no sabré que hacer. Como quieres que viva? Ya, perdóname, y ayúdame a enderezar este pedazo de existencia torcida, porque ya no puedo más. Lo que me hace más triste? Que ni siquiera voy a estar a tu lado, no sé donde ni quien me enterrará, ni donde me caeré muerto- sollozaba
No importa el lugar, uno siempre encuentra lo que quiere encontrar… para unos sucede más rápido que para otros, para mi sucedió aquí, después de 1 año sentada en esta tumba rezando por tu alma Frank. Siempre me había preguntado qué pasaba con las otras tumbas, quien vendría a ponerles flores en este invierno duro, o quien estaría en casa olvidándose de ellas con una taza de café en la mano. Así pasaban los días.
Decidí que me acercaría cautelosamente a este hombre, sudaba solo de las ansias que tenia de preguntarle que hacia allí, que necesitaba y que significaba ese extraño rezo que imploraba en voz baja.
Para mi sorpresa él respondió a cada una de mis preguntas como si nadie le hubiera hablado en más de 20 años, el tenía ganas de hablar y yo de escuchar! – Ya no tengo nada que perder- me dijo – lo he intentado todo y lo único que me quedaba por hacer lo hice hoy: venir a visitarla, tal vez ella sepa que hacer por mi- La tumba de su esposa esta justo frente a la tuya.
Le pregunte qué le pasaba y él me inundó los oídos con reclamos, no omitió detalle. Me conto cómo él y su amante Laura habían estado muchos años juntos amándose intensamente… después de 10 años de romance clandestino decidió dejar a su esposa e ir a vivir con Laura. Todo felicidad, hasta que su esposa murió.
A partir de este día según él su vida había cambiado, le habían echado del trabajo, al principio vivieron bien con algunos ahorros que el tenia, sin embargo 6 meses después con más de 10 entrevistas de trabajo completamente arruinadas, la angustia creciente y los bolsillos rotos, estaban completamente aterrorizados. Laura había sido acusada de robar una pulsera de diamantes en la casa donde trabajaba limpiando y ante la amenaza de una deportación había tenido que pagar 5500 euros que dieron por terminados los ahorros y la relación. Estaba destrozado, sin esposa, sin amante. Ese día, después de un año y convencido de que le había caído un maleficio encima a causa de haberle sido infiel a su esposa, había venido a pedir perdón.
Parecía un buen hombre, me quede escuchando sus historias por más de tres horas hasta que el helaje se hizo insoportable, en este punto lo invite a un café.
No siempre escoger el “camino equivocado” debería ser significado de desgracia, solo era un hombre que se había visto completamente enamorado en un punto de su vida, “todos tomamos decisiones que parecen incorrectas mirando desde el futuro hacia el pasado” me dijo. En este caso el consideraba que no tenía la culpa de haber conocido al amor de su vida luego de haber conocido a su esposa. Y creo que tenía razón, no siempre son lo mismo… y para una persona que ha conocido el amor de cerquita sonaba como una frase verdaderamente sabia. Aun así el sentía que sus desgracias económicas eran producto de una venganza del destino, premeditada desde el mas allá por haber roto las reglas de la naturaleza.
Le recordé amablemente que las reglas de la naturaleza no estaban muy inclinadas hacia la monogamia y que por mucho había roto las reglas de la cultura occidental.
Eso no pareció hacerlo sentir mejor.
“pero, le mentí” dijo sollozando una vez más. Dos de sus lagrimas gruesas cayeron sobre mi café, por alguna razón no me importó, me sentía cómoda con él. Era alguien imperfecto y sincero. Dicen por ahí que la sinceridad es la nueva arma de seducción, pero yo sabía que este hombre simplemente necesitaba hablar con alguien.
“sé que es ridículo pensar en maldiciones post mortem, no me considero un hombre ridículo, pero he estado leyendo sobre el karma, sabes algo sobre eso? No te has preguntado sobre las cosas que te pasan? No es a veces todo muy extraño? Como si los lineamientos humanos fueran una basura y fuera la justicia divina la que nos controla” decía con voz profunda. Yo estaba fascinada, después del café lo invite a casa, si… a nuestra casa, donde además de no tocarnos un pelo hablamos toda la noche sobre los más oscuros pensamientos y realidades de la tierra, todas las paradojas y todas las preguntas, le conté mi vida y el la suya. Resulto ser un hombre increíble que no tenía dinero y había caído en la desgracia.
Después de contarme algunos detalles intuí que su querida Laura no era del todo una santa. Aunque él no lo comprendió en ese momento, después de todo ella si fue la causa de la mayoría de sus problemas, alguien que no había leído más en su vida que la sección de moda de la revista Vogue y que necesitaba una visa para quedarse en el país. El no lo comprendió sino hasta mucho después.
Al día siguiente no vine a visitarte Frank. Fuimos al cine y luego lo discutimos durante varias horas. Poco o nada me importaba que todavía estuviera enamorado de Laura, no se lo pregunté, decidí enfocarme en lo que él me hablaba ahora sobre la vida y sobre el mundo. Había pedido interesarme locamente en la vida de alguien más y eso era lo que había recibido, estaba agradecida. Nunca sabré si esto fue obra tuya, si lo es… gracias.
Le ayude a salir de la pocilga donde vivía, lo instalé en mi vida y le preste dinero. Porque lo hice? Porque yo tenía algo que el necesitaba y el tenia lo que me iba a salvar la vida a mí. Además el dinero nunca fe un problema para nosotros, verdad? Pareció un intercambio justo. A veces creo que él piensa que su maldición se acabo porque vino a pedir perdón de rodillas delante de su esposa muerta (al fin y al cabo ese día me conoció a mi).
Pero yo siento que todo lo que pido llega a mis manos tarde o temprano. Tal vez sea el Karma, por amarte tanto Frank.
Ahora estoy feliz. Tu tumba no me volvió a oír sollozando. Jack y yo dormimos juntos todos los días. Tú serás mi amor eterno pero este es mi amor del presente. Tu y yo nos veremos en la siguiente dimensión. No está mal intercambiar un poco de solvencia económica por otro poco de amor. O si? Para mí es un intercambio justo. Que las tumbas grises me juzguen, de nada sirve la vida si no la compartes…
Te amo Frank, nos veremos pronto.
Bello Vicky! una historia madura y sincera de como gente con diferentes vidas y circunstancias pueden unirse por bienestar propio y de la humanidad sin importar el motivo. "De nada sirve la vida si no la compartes" no importa cual sea el acuerdo si funciona.
ResponderEliminar